Se trata de un tratamiento estético no invasivo que utiliza ondas de radiofrecuencia para estimular la producción de colágeno y mejorar la firmeza de la piel en el rostro. Ayuda a reducir la flacidez, las arrugas y las líneas de expresión, proporcionando un efecto lifting no invasivo y resultados duraderos. Este procedimiento es conocido por su capacidad para mejorar la elasticidad y la apariencia juvenil de la piel facial.
La higiene facial elimina impurezas, maquillaje y suciedad, dejando la piel más limpia y fresca.
La extracción de impurezas y puntos negros limpia los poros obstruidos, reduciendo la probabilidad de brotes de acné.
La exfoliación elimina células muertas, dejando la piel suave y uniforme.
El pH de nuestra piel depende de su salubridad. Por tanto, cuando la piel tiene impurezas, el pH se descontrola y se desnivela. Entre los beneficios de la limpieza facial está la regulación del pH, la cual es muy importante para mantener el buen estado de la piel tanto por dentro como por fuera.
Ayuda a reducir la apariencia de arrugas y líneas finas, dando una piel de aspecto más joven.
El exceso de sebo, causado por cambios hormonales, productos inadecuados u otras razones, puede provocar problemas como el acné. La limpieza profesional ayuda a regularlo y prevenir estas afecciones.
Respondemos a las dudas más repetidas sobre la diatermia facial:
Ayuda a prevenir problemas cutáneos como acné, pero no es una solución definitiva.
Antes y después, se recomienda evitar la exposición al sol y usar protector solar.
La higiene facial es beneficiosa para todas las edades, adaptándose a las necesidades individuales.
Después, se aconseja mantener la piel hidratada y protegida del sol.
Puede combinarse con otros tratamientos estéticos según las necesidades del paciente.